FE

758.  Las culturas que se abren a los valores evangélicos experimentan un enriquecimiento espiritual y una elevación moral.

759.  Dios se nos da en la medida de nuestra capacidad de aceptarlo.

760.  Si no puedes modificar la realidad que te disgusta, acéptala, aunque sea llorando. Pero acéptala. Si crees en Dios, todo te resultará más llevadero. Si no tienes fe, todo cuanto yo pueda decirte será inútil.

761.  Se habla de todo menos de la fe.

762.  La fe vivida y protegida es el mejor camino para el pleno desarrollo del ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios.

763.  A los que no creen en Dios, les molesta muchísimo que haya cosas que no puedan explicarse sin Él.

764.  El Dios cristiano es el único capaz de llenar nuestro vacío existencial.

765.  Dios mío, Tú eres el Eterno Presente. A ti me agarro, en ti quiero vivir y descansar.

766.  Creer es verlo todo como lo ve Dios.

767.  Aunque digas que no crees en Dios, Dios sí cree en ti y en ese poso de honradez y de nobleza que hay en el fondo de tu corazón.

768.  El ser ovejas de Cristo, Buen Pastor, nos libra de ser borregos de las ideologías de turno.

769.  Para Jesús todos los problemas son fáciles.

770.  El Evangelio está lleno de personas que pidieron y recibieron, que buscaron y hallaron, que llamaron y les abrieron la puerta.

771.  Jesús es el amo de lo imposible.

772.  Hay un ideal que nada ni nadie puede destruir: Dios

773.  Dios no tiene límites ni en su poder ni en su amor.

774.  En nuestra vida, unos días es Domingo de Ramos; otros, Viernes Santo; y otros, Domingo de Resurrección.

775.  La indiferencia religiosa puede ser tan peligrosa como el odio.

776.  La especialidad de Dios es lo imposible.

777.  La fe tiene mucho de brújula, de faro, de audacia, de seguridad y de belleza.

778.  Dicen que hay ateos honestos. No lo sé. Yo solamente sé que no conozco ni uno solo.

779.  La fe no es solo cuestión de cabeza. Es también, y sobre todo, cuestión de corazón.

780.  Pedir a Dios solamente cosas posibles es hacerle una injuria.

781.  La eficacia de Dios no es nuestra eficacia.

782.  El plan de Dios no se estropeará aunque nosotros dudemos y hasta caigamos de vez en cuando.

783.  Por la fe conocemos mejor a Dios y al hombre.

784.  Nunca presumamos de una fe madura. Nuestra fe solamente llegará a su sazón cuando lleguemos al cielo, es decir, cuando ya no la necesitemos.

785.  No hay creyente tan firme por cuyo corazón no pueda pasar la sombra de una duda.

786.  La fe entra por el oído, pero también por los ojos. Hay signos externos que nos recuerdan lo trascendente, lo eterno.

787.  Al que no quiere creer, no le interesan ni la divinidad de Cristo ni sus milagros, porque son una interpelación a su conciencia.

788.  Hay muchos más psicópatas por haber reprimido el sentimiento religioso que por haber reprimido el sexo.

789.  Es Dios quien da sentido último a la existencia del hombre.

790.  Cuando se pierde el sentido de Dios, se pierde el sentido del hombre, el sentido de la vida, el sentido de todo.

791.  Bienaventurado el que sabe descubrir el sentido profundo de todo cuanto existe y acontece.

792.   Dichosos los que no necesitan ver milagros para creer.

793.  Podemos construir un mundo sin Dios, pero será una cloaca, una cárcel y un infierno. Podemos construir un mundo con Dios y será la antesala del cielo.

794.  Todos los tiempos son tiempos de Dios, a pesar de los hombres.

795.  Puede más Cristo dormido que el mundo despierto.

796.   Dios sabe mucho mejor que nosotros lo que nos conviene

797.  Para creer en los milagros, no necesito que Dios los haga conmigo. Me basta con que los haga con otros.

798.  El silencio de Dios es también palabra suya.

799.  Cuando el hombre reprime la dimensión religiosa, no tiene otra alternativa que la angustia.

800.  Cuando reprimimos todos los signos de trascendencia, hacemos un daño irreparable a la fe, porque la fe no sólo entra por el oído, sino también por los ojos.

801.  La obstinada negación de Dios es un camino que termina en el precipicio.

802.  La cultura es la guja. La religión, el hilo. Querer hacer un bordado cultural sin religión es dar puntadas sin hilo.

803.  Si tuviésemos el corazón limpio, veríamos a Dios en todo. Todo nos hablaría de Él.

804.  De personas sin religión y sin Dios puede esperarse lo pero.

805.  En el mundo de la fe, lo visible y lo invisible forman una sola realidad.

806.  Mi madre no tiene necesidad de demostrarme que existía antes que yo.

807.  Una ética sin Dios es un portillo abierto a todas las aberraciones e injusticias.

808.  Sin Dios, carecen de fundamento la ética, el derecho, los derechos humanos, ¡todo!.

809.  La negación de Dios tiene como consecuencia la negación del hombre.

810.  La religión verdadera jamás podrá ser el opio del pueblo y la neurosis de la humanidad. Al contrario: cuando falta la religión verdadera, la droga se convierte en la religión del pueblo y el número de neuróticos aumenta de modo alarmante.

811.  Con Dios, resulta difícil explicar algunas cosas. Sin Dios, nada tiene explicación.

812.  Si tuviésemos la gracia de descubrir que todo es gracia, ya no habría desgracia que nos hiciera sentirnos desgraciados.

813.  Hemos de saber mirar más allá de las cosas.

814.  El drama terrible del humanismo ateo ea que se siente incapaz de dar una respuesta válida a los grandes interrogantes de la existencia.

815.  Dios es el Ser perfecto, el Ser completo.

816.  No basta creer en algo, hay que creer en lo que hay que creer.

817.  Yo no he visto mi corazón. Tampoco sé muy bien cómo funciona. Pero siento sus latidos. Estoy vivo. Tampoco he visto a Dios. Su misterio me desborda. Pero sé que me ama. Y lo amo. No necesito saber mucho más.

818.  El cristianismo no es una utopía irrealizable.

819.  ¿Dices no tener fe? Ama y la tendrás.

820.  Una democracia sin Dios es una “demonocracia”.

821.  Donde no se acepta el Evangelio, tampoco se cumple la Ley Natural en todos sus puntos.

822.  Un estado basado en en materialismo no suele durar mucho. Y es que el tronco podrido no sirve para viga.

823.  Los tiranos pasan. La fe permanece.

824.  Me dices que no tienes fe, pero que querrías tenerla. Muy bien, toma este consejo: actúa como si tuvieras fe y acabarás teniéndola. Te lo aseguro.

825.  El demonio huye de la habitación en la que hay unos evangelios.

826.  Hay que creer no sólo con la cabeza, sino también con el corazón.

827.  Para amar a Dios es necesaria la fe y para creer es necesaria la convicción.

828.  Los sabios creyentes fortalecen mi fe, y las gentes sencillas ricas en fe, me emocionan.

829.  En épocas pasadas, la fe creaba cultura. En nuestros días, muchos hombres y mujeres, desde la cultura, descubren la fe.

830.  Los misterios cristianos, por ejemplo, la Santísima Trinidad, la virginidad de María Santísima, la divinidad de Jesucristo, su presencia real en el Sacramento de la Eucaristía, etc., son racionalmente incomprensibles, pero no son ni absurdos ni superfluos.

831.  La naturaleza refleja la belleza, la sabiduría, el poder y el amor de Dios. Así pues, debemos contemplarla, amarla, respetarla, cuidarla. Para el creyente, ser ecologista viene a ser consecuencia de su fe.

832.  La fe es una magnífica terapia.

833.  El hombre de fe sabe ver la providencia de Dios incluso en lo que parece absurdo.

834.  El cristiano del futuro tendrá que ser místico, si quiere que su fe no quede asfixiada por el materialismo.

835.  El que ama de verdad, si no tiene fe, la encontrará. Y, si tiene fe, no la perderá.

836.  Debemos colar los signos de los tiempos como se cuela el café. El colador debe ser la fe, el Evangelio.

837.  Tenemos demasiados apoyos, demasiadas seguridades, como para poder tener en Dios una confianza de lirios y de pájaros.

838.  La política no es la única dimensión, ni la más importante, de la vida humana.

839.  Más cierta es la fe que la certeza.

840.  Cuando la sociedad prescinde de Dios, se convierte en una jungla en la que impera la ley del más fuerte.

841.  Una sociedad sin Dios es un mar de pasiones turbias en el que el pez grande se come al chico.

842.  Un estado ateo es una apisonadora de los derechos humanos.

843.  Algunos empiezan a creer en Dios cuando les toca la lotería. Y sienten que su fe se resfría cuando tienen un catarro. Otros, por el contrario, se acercan a Dios cuando los meten en el quirófano y se alejan de Dios cuando se ven sanos, ricos y poderosos.

844.  Cuando se lleva el pragmatismo al extremo, se es capaz de pactar con el mismísimo diablo.

845.  Señor, gracias por haberte conocido.

846.  Donde no hay catecismo y urbanidad, habrá cataclismo y vulgaridad.